La actitud es lo que somos. Es decir, es nuestra personalidad y la capacidad que tenemos para resolver una situación laboral o para saber estar en una reunión de trabajo, por ejemplo.
Es la forma con la que haces las cosas, tu predisposición en el trabajo, por ejemplo. El comportamiento que tienes y que forma parte de tu personalidad.
Esta es importante porque es lo primero que los demás ven de nosotros mismos. De nada sirve tener un CV de 10 si tu actitud no es de matrícula. A las buenas personas todo el mundo las quiere en su equipo.
Decidirse por el cambio no es una opción fácil pero está claro que cuando uno no se siente bien en la situación en la que está conviene tomar medidas. Estas medidas deben tomarse tanto en la vida personal como en el trabajo.
La brecha que se ha estado produciendo y que sigue patente entre las universidades y las empresas es de todos conocida. Parece que la realidad de la empresa y la del estudiante no son la misma. Esta diferencia de realidades hace que el estudiante no se sienta en la universidad motivado con lo que estudia…
Sentido del humor y creatividad son necesarios en nuestra vida personal y profesional en mayor o menor medida. En primer lugar, pongámonos de acuerdo. ¿Que entendemos por cada uno de estos conceptos?
Ocurre muchas veces en la vida. Nos ilusionamos mucho por algo y corremos el riesgo que después no se dé. Volcamos mucha energía, soñamos y visualizamos ese trabajo, esa relación, ese viaje, ese sueño. Nos proyectamos y viajamos en él durante mucho tiempo, invirtiendo tiempo, energía, dedicación. Y finalmente no se da. Y, por supuesto,…
Hablar de optimismo y motivación es hablar de José Carlos Mena. El lunes 28 de mayo le hicimos una pequeña entrevista para que nos explicara, en nuestro Espacio Editorial, todo sobre Piedras en el camino.
